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TIEMPO DE LECTURA: 3 MINUTOS
Autor: Úrsula Martínez. Maestra en Competencias y Especialista en Logoterapia Escuela Bancaria y Comercial
Índice de contenido
- Teoría del bienestar objetivo y subjetivo
- Teoría del bienestar psicológico
- Reflexiones en torno a las teorías del bienestar
- Entonces… ¿Realmente qué significa el “bien estar”?
Durante varios años, don Carlos Kasuga Osaka, Ex Alumno Distinguido EBC 2009, fundador de la división mexicana de productos Yakult, recorrió nuestros campus y se reunió en ellos con nuestra comunidad estudiantil, para exponer ante ella los cuatro pasos de su programa integral de desarrollo profesional y empresarial: el bien ser, el bien hacer, el “bien estar” y el bien tener. Inspirada en este programa, escribo las siguientes líneas para sumar a lo expuesto por don Carlos algunas otras ideas.
1. Teoría del bienestar objetivo y subjetivo
Rafael Bisquerra Alzina, catedrático emérito de la Universidad de Barcelona, señala la diferencia entre “bienestar objetivo” y “bienestar subjetivo”:A pesar de contar con un sueldo alto (bienestar objetivo), una persona puede sentirse insatisfecha con ese salario (bienestar subjetivo). Y a pesar de contar con un sueldo bajo, otra persona puede sentirse plenamente satisfecha con sus ingresos.
Por otro lado, el psicólogo Daniel Kahneman advierte la existencia de dos tipos de bienestar subjetivo:
2. Teoría del bienestar psicológico
Para la teoría del bienestar psicológico, los procesos cognitivos (satisfacción con la vida como un todo) y afectivos (procesos de experiencias emocionales) son esenciales y ambos se relacionan entre sí. Es por ello que los indicadores macroeconómicos no son capaces de determinar el nivel de bienestar de una sociedad. Para conocer ese nivel, es necesario preguntar directamente a las personas acerca de sus sentimientos y sus emociones presentes.
3. Reflexiones en torno a las teorías del bienestar
Pero vayamos más allá de los procesos, abordemos una tercera dimensión, aquella que se refiere al sentido mismo que cada uno de nosotros da a la vida. ¿Pero cómo acceder a esta dimensión, si en la mayoría de los casos su puerta de entrada es el inconsciente?
Nos enfocaremos en dos recursos que nos permiten tomar esta conciencia del bien estar:
- El autodistanciamiento, que es la capacidad de todo ser humano de tomar distancia de sí mismo, para monitorear y controlar los propios procesos emotivo-cognitivos.
- La autotrascendencia, que es la capacidad de la consciencia de dirigirse hacia algo o alguien significativo, para realizarse en una actividad específica o en otros seres humanos.
4. Entonces… ¿Realmente qué significa el “bien estar”?
En el momento en el que uno se cuestiona acerca del “Bien Estar” y el sentido y valor de la vida, se está siendo verdaderamente humano.
El “bien estar” se construye con las alegrías activas que creamos, que construimos conscientemente, que planificamos, tanto en el proceso como en el resultado, disfrutamos algo que, si nos lo proponemos, puede nutrirnos el resto de la vida. Por lo tanto y desde esta óptica activa, el bienestar y la felicidad se construyen de pequeñas alegrías activas, que vamos construyendo con “bien estancias” elegidas y construidas de manera proactiva y decidida.
Por lo tanto, para aspirar a un “bien estar”, debemos actuar con los ojos abiertos ante lo que continuamente nutre nuestra existencia: la calidad de las relaciones que elegimos y las emociones que buscamos experimentar continuamente, así como el valor de la información con la que nutrimos nuestro conocimiento del mundo.